En el universo imaginario de
J. R. R. Tolkien y en la
novela El Silmarillion,
Thangorodrim (que significa ‘montañas de la tiranía’ en
sindarin) es el nombre que se le dio al volcán que
Melkor alzó sobre
Angband en las
Edades de las Estrellas, luego de huir de
Aman, tras destruir los
Árboles de los Valar y robar los
Silmarils. Esta terrible montaña estaba coronada por tres picachos, llamados las Torres Tonantes que estaban hechas «con las cenizas y la lava de los hornos subterráneos, y las vastas escorias de la apertura de los túneles»; por las bocas de las mismas constantemente salían negros vapores que contaminaban el cielo del norte.